Así mismo, le solicitamos que se convoque a la Junta de Portavoces para consensuar una declaración institucional, “expresando el rechazo de la Corporación al proyecto Iparaixe II y en defensa de los valores medio ambientales, culturales, histórico y paisajístico del valle de El Regato y sus montes”, e informe de la misma a la ciudadanía.
Se da la circunstancia de que, tras el registro de la moción, tuvimos conocimiento de la resolución de la Consejería de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, de dar a la empresa promotora, propiedad del grupo belga Aspiravi, autorización previa para su tramitación, y de la intervención de la consejera Arantza Tapia en el Parlamento vasco que anunció su pretensión de agilizar este proceso todo lo posible, ya veremos si dentro o no del marco de la legalidad vigente.
Por ello y dado que estamos ante los primeros pasos del procedimiento administrativo para poner en marcha este proyecto eólico, que supondría la degradación irreversible de hábitats de interés comunitario y de flora y fauna amenazadas, la pérdida de valor del patrimonio cultural y paisajístico en el valle de El Regato, urge pronunciarse para que el órgano competente conozca la posición de Barakaldo y su Ayuntamiento
Los datos aportados por la empresa, propiedad del grupo de inversión belga ASPIRAVI, señalan la implantación de una central eólica de 5 aerogeneradores de más de 200 m de altura y una potencia total de 21 MW, que se instalarían en Monte de Utilidad Pública (MUP) de Argalario, cuyos propietarios son los Ayuntamientos de Barakaldo y Trapagarán, con una ocupación de superficie de Monte Público de aproximadamente 90 ha, lo que en proceso constructivo conllevaría una pérdida de biodiversidad irreparable, incrementado por la ampliación de viales, instalaciones auxiliares, instalación de línea de alta tensión hasta subestación eléctrica, riesgo para acuíferos y galerías subterráneas, etc., y, en funcionamiento, la amenaza constante de muerte para aves y murciélagos –entre las que se encuentran el alimoche y el buitre, protegidos por el Plan de Gestión de aves necrófagas-, además de afecciones a la salud del resto de fauna y personas por contaminación acústica y lumínica, además del incremento de riesgo de incendios, entre otras afecciones.
Los colectivos impulsores de esta moción tenemos clara la necesidad de apostar por las energías renovables, al igual que tenemos la obligación de conservar la biodiversidad, si de verdad queremos hacer frente a los efectos del cambio climático.
Por eso decimos, “Renovables sí, pero ASÍ NO”, porque hay otro modelo para abordar esta problemática: el aprovechamiento máximo de los ámbitos urbanos ya antropizados, como ya reflejamos en nuestro escrito de alegaciones al Documento de aprobación inicial del Plan Territorial Sectorial de Energías renovables, incluyendo una alternativa que podría generar más de 100 MW únicamente en suelo urbano. Un planteamiento que coincide con lo indicado por el departamento foral de Medio Natural, vistos sus informes técnicos sobre el Plan Territorial Sectorial de Energías Renovables.
Es claro que nosotras no decimos “aquí no”, como distorsionan intencionadamente desde el Gobierno vasco en un acto claro de desinformación, sino “ASÍ NO”, porque queremos que nuestro municipio sea parte de la solución, pero desde el respeto al medio natural. No es momento de hablar de nichos de negocio, sino de futuro.
22 de septiembre de 2023
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